Como apunta el dicho popular... 'Si quieres saber como es Rafaelillo...' pues ya tienen todo el puzzle completo. Carguillos y Rafaelillos han ido de la mano desde los tiempos de Viriato y si no recuerden a unos tales Audas, Ditalcón y Minuro (cito de memoria) y sientan la luz en sus azoteas con el conocido 'Roma no paga traidores'.
Habrán conocido sin duda a Rafaeles varios: Sanzio, el Gallo, Martos, ángel y tal vez el vecino del cuarto (izda), pero es posible que no se hayan fijado en esos 'Rafaelillos', otrora normalitos y que, investidos de alguna librea de ujier o similar (Ayuntamientos, Comunidades Autónomas, Concejalías prebendas varias), han pasado a ser parientes del Quinto Jinete.
Esta mañana el metro ha tardado 12 minutos en llegar a la estación de Simancas (si, existe, línea 7), cuando antes tenía una cadencia de 3. ¿Rafaelillo de turno?... el señor Lámela, otrora martillo de sedadores y hoy perseguidor de obreros a las seis de la mañana.
Ayer nos enteramos que se les van a quitar las competencias a los guardas forestales dejándoles en simples 'blasillos' que solo podrán contemplar desmanes e incendios de las fincas de los señoritos desde fuera y con permiso de un juez. ¿Rafaelillos al quite?... la inefable señora Aguirre y su portacoz Beteta, cerebros portentosos ambos como es sabido.
Podría seguir con un tandem también conocido como el formado por Zapatero-Moraleda, presidente de la Cosa y sheriff de la Comunicación respectivamente, pero no me va a caber lo que he de decir sobre el señor de las Lechugas y lo dejo para mañana.
(Continuará, palabra)
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